viernes, 23 de septiembre de 2011

Presente, aquí, ahora, conmigo, ya.


No tengo ganas de nada, sinceramente. Hace muchos días que no escribo por aquí. Muchos días que no me expreso, que no dejo que las palabras salgan de mi corazón para quitarme todo aquel peso que llevo tras la espalda. Hace ya muchos días que me peso a mi misma, que no soy yo, que no sonrio. Hace ya bastante tiempo que vivo sin ganas, que sonrio sin tener que hacerlo. Pero tengo que abrir los ojos. Tengo que afrontar la realidad, tengo que luchar por mis sueños. Tengo que luchar por todo aquello que un día quise, pero dejar a un lado todas las ilusiones del pasado que el presente mismo me ha confirmado que son imposibles. Debo olvidar todo lo que vivi en el pasado y comenzar el presente. Un presente, aquí, ahora, conmigo, ya. Siendo yo misma, sin llantos, sin penas, sin lágrimas, sin nada. Solo con sonrisas, con bonitas sonrisas pintadas en mi rostro. Nada de sueños ni de ilusiones rotas. Nada de principes azules ni cuentos de hadas. Nada de historias, ni de palabras bonitas. Nada de juguetes, nada de rosas. Tan solo yo. Yo y mi corazón. Yo y mis momentos vividos. Yo y las lágrimas que aún se derraman por mis mejillas. Yo misma, conmigo. Un presente conmigo a solas para poder afrontar lo que me depara en el. Con tiempo para pensar, para reflexionar, para conocerme. Para conocer a la chica que ya está cansada de llorar y quiere comerse el mundo. Un presente para olvidarte, a ti y a mi absurda gilipollez. Para olvidar todos los besos, todas las caricias, todos los recuerdos. Para quemarlos, para borrarlos, para sacarlos de mi vida. Un presente para tratar de ser feliz. Para buscarme un futuro, un buen futuro. Un futuro en el que tu no estés en mi corazón. Tatuaré mi nombre en mi propio corazón para así tachar el tuyo. Viviré por mi y solo por mi, sonreiré por mi y tan solo para mi. Borraré todas las fotos, todos los recuerdos, todo. Seré yo, quien siempre quise ser. Cariñosa, dulce, tierna aunque algo borde. Sencilla, rara, amigable, pava y demasiado bromista. Fria, seria pero alegre en los mejores momentos. Seré aquella que conocistes hace dos años. Aquella niña, pero esta vez más mayor. Con más experiencia, con más miedos. Con más dudas, pero con más ilusiones. Más ilusiones de vivir, de intentar ser feliz. Escribiré yo misma mi presente y no dejaré que nadie, ni el mismo destino se intrometa en el. Me encerraré a mi misma en mi corazón y lo sanaré con mis caricias. Con mis palabras, con mi ternura. Le pondré miles de parches hasta que se sienta bien. Le cuidaré, le protejeré, para que nadie más le vuelva a herir. Y cuando sane por completo, podré decir que soy feliz.

No hay comentarios:

Publicar un comentario