miércoles, 6 de agosto de 2014

El sueño del Sol

Perder el sentido cuando el mal le susurra al oido, en esa angustia del olvido, que ya ni recuerda que era estar viva. Odiar las manias, amanecer sin compañia, sin nada de eso poco que tenia.
Y entre la gente nunca anda pendiente pues no habita en ninguna mente. Solo es un alma endeble, que recuerda sus pesadillas, vive en las horas frias. Que habita sin el poco amor que antes tenia y amargada ya ni sabe recordar lo bien que se sentia.
Es esa media sonrisa que por las prisas apenas se divisa, y tan callada, a veces tan cerrada, cuanto amor aguardaba y que poco mostraba. Todo por lo mal que la trataban.

Y con los miedos en mente avanza mientras miente, en un baile con la muerte, entre tanta gente. Fantaseaba con las maravillas y la vida bajo sus costillas. Recordaba y malvivia cuantas penas entre las maravillas, y lo triste es que aun asi se mantenia, en esa orilla de la esperanza y alegría donde el sol solo se posaba una vez al día.
Y fue en uno de esos momentos cuando todo cambio, aparecio su salvador y un angel la acogio. Cuando sus enormes brazos la envolvieron todo los problemas se disolvieron, y ya no existieron mas peros. Su media sonrisa caida se lleno de alegría, ya apenas se le visualizaban las costillas ni ese palido rostro que sentía. Fantaseaba y baialaba, cantaba y ya ni lloraba, entre tantos besos apasionados que se daban.

En uno de esos momentos en los que el sol desaparecio, parece que los dioses planearon bajar el telón. Aquel apuesto conquistador que de los cielos descendio poco a poco en la inmensa y olvidada oscuridad decayo, donde solo existian las impías y promesas no cumplidas.
Y cuando pacto con el demonio, ya ni le quedaron fuerzas para salvar a su retoño. Aquella chica adorada, sus fantasias y momentos compartidos antes de saberlo ya se habian ido, partiendo a otro cruel destino gracias a lo que él habia elegido. Y, solo por tratar de luchar decidio sacrificar todo cuanto podia dar, con su vida, alma y cuerpo, al morir el toda alma pura se echo a llorar, y ese sol que solo una vez solia aparecer, decidió inundarse en un largo sueño en busca de un nuevo amanecer, ese que solo encontraría quien salvara a esa pobre niña de todas sus pesadillas.