lunes, 27 de junio de 2011

Te echo de menos.



La verdad, estos días se me están haciendo muy dificiles, aunque no se lo diga a nadie. Veo a las parejas por la calle, besandose, abrazandose, diciendoselo todo con una simple palabra...Y entonces, te imagino. Te veo, te veo a mi lado como si fueras tan solo fruto de mi imaginación. Siento que me besas, que me abrazas, que no eres más que un espiritu vagabundo que busca espacio en mi corazón. Siento como por un suspiro entras en mi, y del mismo modo, sales. Y ya no puedo recuperarte. No te encuentro entre la brisa, el aire ya no huele a ti. No te veo por las esquinas, ni te sueño entre un sueño y otro. No te encuentro en mi sonrisa, ni en mi vida, ya no te encuentro. Te busco por todos lados, pero has desaparecido. Me pregunto si debería colgar tu foto en los muros de mi corazón, en tu busca. Me pregunto si debería contactar una cita con el destino para que me de un billete de ida hacia el mismo. Me pregunto si debería dormirme y decidir no despertar en ese momento, para que acudas a mi rescate, pues sería así, ¿verdad? Me despertarías con un beso, tal y como un principe azul, y me susurrarias al oido todo, todo lo que has deseado decirme en este tiempo. Me pregunto si debería dejar de hacerme preguntas y aprender a vivir la vida sin ti. Pero el tiempo pasa, y yo te echo de menos. El tiempo pasa, y no te encuentro, ni en la brisa, ni en el aire, ni en el mar, tan solo en el fondo de mi corazón.
Hace ya tiempo, mucho tiempo, que te estoy buscando. Busco tu olor, las sensaciones que me hacias sentir, te busco a ti, pero al final, termino por rendirme. Ya quedan pocos recuerdos de tu amor; del suspiro que entro en mi vida, y del mismo modo, salio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario