lunes, 20 de junio de 2011

La pequeña lucha.


Juntos quisimos vencer cualquier obstaculo. Luchabamos contra mucho; contra una simple pantalla, contra unos cuantos kilómetros de más, contra unos números insignidficantes de edad, contra un gran mapa y sobre todo, contra un destino que no quería saber nada de nosotros.

Juntos, fuimos felices. Superabamos no vernos, y a la misma vez los kilómetros que trataban de intrometerse entre nosotros. Juntos, fuimos capaz de aprender a amar a travez de una pantalla. De sentir los abrazos, los besos y las caricias, sin necesidad de el tacto. Fuimos capazes de entender y comprender que es aquello a lo que se le llama amor.
Juntos pudimos luchar contra el viento y la marea, sin hacernos el mayor daño. Pudimos contra el destino y contra todo lo que se pusiera por el medio. Era tán facil encontrar un motivo para ser feliz cuando nos estrechabamos entre nuestros brazos. Aprendimos a sonreir y a amar. A ser capaz de levantarse siempre que tropezabamos y a la misma vez, aprendimos que la distancia no es más que una palabra.
Juntos, lloramos. No realmente juntos, pero si unidos. Llorabamos por no poder vernos, por no ser capaz de borrar el destino de cada uno; porque siempre se podía ir a contra destino, pero es imposible borrarlo. Es dificil imaginarse la vida con una persona, a la cual no has visto. Es realmente triste tratar de imaginar, si no tienes ni un leve recuerdo, más que unas simples palabras y más palabras. Es horrible la angustia de despertarte por las noches llorando y no poder acurrucarte entre esos brazos.
Juntos, planeamos un futuro cercano. Con simples palabras, construiamos un camino que cada día se aproximaba más a nosotros. Soñamos, creamos y imaginamos un nuevo mundo, en el cual nosotros seríamos los únicos habitantes. Imaginamos inconscientemente, como sería nuestra casa; con puertas realmente grandes, para que entrara mi gran cabeza - por la mínima mania que tenía de decirme cabezota- soñamos en poder vernos este mismo verano y en lo que haríamos en ese mismo momento. Deseabamos besarnos, abrazarnos y susurrarnos al oido miles de palabras. También mirarnos, de manera que sobrara cualquier susurro. Planeamos que nos iriamos a vivir juntos, y yo por mi propia cuenta, planee irte a buscarle en cuanto me fuera posible. Añorabamos estar abrazados, aún sin haberlo sentido nunca y deseabamos mordernos los labios. Queríamos hacernos felices, crear un futuro en el cual solo existiera un nosotros.

Juntos...Juntos estabamos a pesar de todos los obstaculos. Prometimos que siempre sería así, y mi promesa aún sigue. A día de hoy, ya nada es lo mismo. Ya no buscamos el calor de nuestros abrazos, ni la dulzura de nuestros besos. Tan solo tratamos de encontrar un lugar en este mundo. Juntos, realmente juntos, poco a poco nos adaptamos a que el destino se hiziera de nuevo con nuestras vidas. Y juntos, siempre juntos, nos rendimos en esta pequeña lucha, en la cual ganó la distancia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario