Después de tanto tiempo me atrevo a decir lo que de verdad siento.

A distancia le tenía, pero no era lo que yo quería. A mi lado no le sentía, sentia el miedo de no tenerle en compañía. Y queriendo y sin querer le dí todo lo que debía, hasta al final acabar esta mala historia fría. Empujada por el destino, por esas cosas que ya no tuvimos. Deje de luchar por un amor que en realidas nunva vino, dejando que tu corazón sangrara en el más intenso rojo vivo. Y lo siento, pero nunca más será mío, pues los quizases no forman parte de mi destino. Quería tenerle como amigo pero la muerte decidió aparecer por el destino. Y el conmigo, o ya no tendre puertas para entrar de nuevo y alcanzar aquello que nunca me hizo tocar el cielo. Ya no le amo en silencio, ni quiero perderme entre las paginas de su cuento, quiero dejarme llevar por el viento, y que así el amor me dedique otro encuentro. Y ya nada sera cierto, ni lo que tuve ni tendré ese día en el cual no existian los cuerdos. La verdad apareció como un sabio sin miedo a quedarse sin labios. Y a partir de eso ya nada volvera, el debera dejarme marchar. Pero temo que alguna locura hará, y por ello un trauma me causará. Espero que ya no me vuelva a buscar, que se enamore de otra y que se olvide de mi respirar. Que si me muero no venga a llorar, y si me caso no se lamente hasta no respirar. Que entienda que ya no le amo mas, que hay otro donde el debería estar. Que la distancia es la prueba de que Nunca Jamas se encuentra en nuestras puertas. Y otro conmigo, y otra contigo ya no volveremos a saber mas de lo que nos unió un día sin tener en cuenta de que los inviernos serian frios. Y sin superar el calor, maldito mal amor. En un verano comenzo, y en el siguiente termino. Ya no le guardo ningun amor, pero no soy capaz de decirselo asi por temor. Le quiero, pero con el uso de la razon, como un amigo, pues ya no hay hueco para el en mi corazón. Quiero a otro que encontré un día sin ninguna razón, y ahora se a adentrado el solito en mi corazón. Sin preguntas y con apenas palabras de amor, tengo ganas de rozar sus labios y encerrarme allí donde sus brazos. Y siento decirle esto, pero ya todo se ha quedado en eso, ya no te pertenezco.